Se comprende como comercio electrónico a las diferentes maneras de realizar actividades empresariales por medio de la Internet. Si bien hasta hace algunas décadas la posibilidad de efectuar transacciones comerciales en un entorno virtual y globalizado era un tema exclusivo de la ciencia ficción, con el paso del tiempo y las dinámicas transformaciones de la tecnología este fantástico entorno ha podido concretarse en un gran ambiente de comercio en línea. Una gran cantidad de firmas se dedica a desarrollar sus actividades productivas exclusivamente en la red.
¿Cuáles son las ventajas de esta manera de proceder a comparación de las alternativas convencionales de gestión empresarial?
Eso es lo que comentaremos a continuación.
Publicitarse o desaparecer
Probablemente la mayor ventaja que ofrece la Internet como plataforma de comercio estriba en la publicidad masiva que permite. Antes era necesario que una firma desembolsara considerables cantidades de dinero para montar colosales campañas publicitarias para cine, radio y televisión. Las compañías sin los recursos monetarios suficientes para efectuar tal dispendio publicitario eran fácilmente superadas por las corporaciones más poderosas y conocidas y al final no les quedaba otro remedio sino desaparecer.
Darse a conocer rápida y masivamente
Hoy en día, con la popularidad de la red, esta circunstancia se ha modificado grandemente. No existe ámbito de la sociedad y la cultura que no se encuentre estrechamente vinculado con la Internet y todas sus posibilidades de comunicación global. Esta apertura ha propiciado que empresas de pequeño y mediano tamaño puedan tener una oportunidad privilegiada para sostenerse e incluso para crecer y prosperar hasta niveles admirables. Publicitarse en la red no es caro y sabiendo como manejar las circunstancias puede lograr que una pyme dispute al tú por tú con una empresa transnacional.
El negocio del futuro
Actualmente las personas siguen un ritmo de vida vertiginoso, con el día entero ocupado por diferentes actividades planificadas con antelación. De tal modo que siempre prefieran aquellas vías de acción que les resulten eficaces y de rápido resultado, independientemente del medio en el que se desarrollen. El ejercicio del comercio no se encuentra ajeno a esta circunstancia y tal es la razón de la creciente popularidad y crecimiento de los establecimientos mercantiles online y de la presencia empresarial en Internet. El comercio virtual es el negocio del futuro disponible y aprovechable en el presente. Tomar conciencia de ello, lo más pronto posible y actuar en consecuencia con mucho afán emprendedor es la mejor manera de forjarse un gran porvenir.
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