Dante, Giovani Papini y Giorgio de Chirico lograron hacer universales sus particulares perspectivas de Italia, merced a su capacidad artística. Ellos transformaron paisajes de la vida cotidiana, sus vivencias en esas tierras mediterráneas, en verdaderas experiencias metafísicas, tránsitos hacia estados diferentes de conciencia. Italia se hizo en ellos, crisol de mundos y de posibilidades de eternidad. Esa intención parece emular el fotógrafo Rosario Puglisi en esta serie de preciosas capturas. En estos paisajes, Italia parece transfigurarse en un percibir la sutil diferencia que enriquece de sentidos cualquier lugar del mundo.
El vértigo de la belleza, los mundos del arte, una filosofía de la creación estética:
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